Si la sociedad se va a dedicar a un negocio distinto al de tu empresa no hay problema. Puedes hacerlo. Si se va a dedicar a lo mismo y vas a ser socio trabajador o administrador, existe el principio de no concurrencia con tu empresa, por lo que deberás comunicarlo a la misma para que te de permiso, ya sea de forma expresa o tácita. Por último, si solo vas a ser un socio de la nueva sociedad, sin trabajar en ella y sin cargo alguno, no tienes que decir nada en tu empresa.