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defensa en delito de extorsión
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Defensa en delito de extorsión
Hola tengo una tarea en la cual se supone que actuare como defensa de una persona que es acusada de delito de extorsión, quisiera saber que argumentos puedo utilizar para defenderle o como me podria preparar, a continuacion dejo el caso teorico:
Juan, de 39 años de edad, es propietario de un negocio de venta y reparación de electrodomésticos en la ciudad de Chihuahua, Chihuahua, del cual ha sido propietario por 7 años, el mismo atiende el negocio y realiza las ventas y reparaciones correspondientes.
Francisco, de 37 años de edad, se desempeña laborando como docente de una escuela primaria también en la misma ciudad de Chihuahua, Chihuahua, trabajo el cual ha desempeñado de manera satisfactoria a lo largo de 10 años, siendo esta su única fuente de ingresos.
Juan y Francisco mantienen una amistad de 10 años ya que se conocieron por amigos en común, en su momento, Francisco le otorgo un préstamo económico a Juan para que pudiese abrir su negocio, préstamo el cual fue liquidado en el plazo que habían establecido en su momento.
Juan, de 39 años de edad, es propietario de un negocio de venta y reparación de electrodomésticos en la ciudad de Chihuahua, Chihuahua, del cual ha sido propietario por 7 años, el mismo atiende el negocio y realiza las ventas y reparaciones correspondientes.
Francisco, de 37 años de edad, se desempeña laborando como docente de una escuela primaria también en la misma ciudad de Chihuahua, Chihuahua, trabajo el cual ha desempeñado de manera satisfactoria a lo largo de 10 años, siendo esta su única fuente de ingresos.
Juan y Francisco mantienen una amistad de 10 años ya que se conocieron por amigos en común, en su momento, Francisco le otorgo un préstamo económico a Juan para que pudiese abrir su negocio, préstamo el cual fue liquidado en el plazo que habían establecido en su momento.
La amistad que han sostenido a lo largo de esos años ha sido normal sin problemas mayores, ni afectaciones. El 15 de enero de 2016, Juan acude a su amigo Francisco para comentarle que se encuentra atravesando una difícil situación económica ya que las ventas y las reparaciones que realiza en su negocio han ido a la baja, principalmente culpando a la denominada “cuesta de enero” y que tenía una deuda de 10,000 pesos que tenía que saldar antes del fin de mes para cubrir con la renta del local comercial y cuestiona a Francisco respecto a la posibilidad de que le facilitara un préstamo monetario por la cantidad mencionada con el fin de saldar la cuenta y poder continuar operando su negocio. Juan alega que “brincando” el mes de enero las ventas mejorarían y podría pagarle el préstamo. Juan accede a facilitarle el préstamo a su amigo proporcionándole el total de la cantidad que necesitaba (10,000 pesos), ambos pactan que sería principios del mes de marzo como plazo límite para la liquidación de la deuda sin fijar un día exacto, sin embargo, nunca se fija la existencia de ningún tipo de interés sobre el pago o el incumplimiento del mismo, si no por el contrario, Juan accede a pagar exactamente la cantidad que se le presto en el plazo que se estableció.El acuerdo entre ambos se realizó de forma “amistosa”, siendo todo de manera verbal, sin ningún tipo de contrato o pagare de por medio. Juan utilizo el dinero para realizar el pago de la renta del local donde se encuentra ubicado su negocio. Se cumplió el plazo establecido y Francisco llamo a Juan con la finalidad de solicitarle el dinero que le había prestado situación a la cual Juan contesta que las ventas no habían mejorado mucho y que aún no contaba con el total de la cantidad que le había prestado, solicitándole que le diera unos días más, a lo que Francisco accedió diciéndole que necesitaba que la deuda se saldara antes del mes de abril debido a que él también contaba con unos gastos que tenía que liquidar, Juan se compromete de manera verbal a pagarle antes del mes de abril. Al llegar el mes de abril, Francisco llama nuevamente a Juan solicitándole el dinero que le había prestado, Juan nuevamente le dice que no cuenta con la cantidad total ya que había tenido unos inconvenientes familiares y se habían “atravesado” muchos gastos, solicitándole nuevamente más tiempo, Francisco, molesto, le comenta que necesitaba el dinero para unos gastos propios que ya había realizado y alega que ese no era el acuerdo que tenían, a lo que Juan contesta que “no tenía como hacerle” y que “lo iba a tener que esperar de perdida un mes más”.
Francisco, muy molesto, le comenta que no va a esperar más de 20 días más, y que, si no “iba a ir a quitarle el dinero a la fuerza”, Juan accede a la exigencia. Cumpliéndose nuevamente el plazo establecido, Francisco intenta en reiteradas ocasiones el llamar a Juan para exigirle su pago, sin embargo, Juan nunca le atiende el teléfono y, cuando le llamaban de otro número, Juan colgaba. Francisco llama a su amigo Arturo y le platica su problema con Juan, a lo que Arturo le convence para acudir juntos de una forma violenta al negocio de Juan para cobrarle el dinero, Francisco acepta. Arturo y Francisco toman dos bates de base ball, para usarlos “en caso de necesitarse” contra Juan y acuden al negocio. Al ingresar ambos con los bates de baseball, exigen a Juan el pago de los 10,000 pesos de la deuda, sin propiciar ningún tipo de daño físico hacia Juan o hacia su negocio, Juan, muy asustado, le paga el dinero a Francisco para evitar, según pensaba, que lo golpearan.
Antes de abandonar el lugar, Arturo le exige a Juan el pago de 3,000 pesos extras alegando que era “por las molestias que había ocasionado”, Francisco no realizó ningún comentario en ese momento, Juan aun asustado, le proporciona el dinero a Arturo, ambos (Francisco y Arturo) abandonan el local. Una vez ya alejados del local, Arturo le quiere dar los 3,000 pesos extras a Francisco, sin embargo, este no acepta comentándole que “el solo necesitaba el dinero que le había prestado a Juan, que el extra podía quedárselo él”, a lo que Arturo acepta de inmediato, ambos se despiden y cada quien toma su camino. Al siguiente día, Juan acude a la Fiscalía General del Estado para interponer una denuncia por extorsión en contra de Francisco y Arturo por todo lo que había pasado. La fiscalía emite una orden de arresto en contra de ambos, Francisco es capturado y Arturo escapa del país a “esconderse” un tiempo con un primo en los Estados Unidos.
Francisco, muy molesto, le comenta que no va a esperar más de 20 días más, y que, si no “iba a ir a quitarle el dinero a la fuerza”, Juan accede a la exigencia. Cumpliéndose nuevamente el plazo establecido, Francisco intenta en reiteradas ocasiones el llamar a Juan para exigirle su pago, sin embargo, Juan nunca le atiende el teléfono y, cuando le llamaban de otro número, Juan colgaba. Francisco llama a su amigo Arturo y le platica su problema con Juan, a lo que Arturo le convence para acudir juntos de una forma violenta al negocio de Juan para cobrarle el dinero, Francisco acepta. Arturo y Francisco toman dos bates de base ball, para usarlos “en caso de necesitarse” contra Juan y acuden al negocio. Al ingresar ambos con los bates de baseball, exigen a Juan el pago de los 10,000 pesos de la deuda, sin propiciar ningún tipo de daño físico hacia Juan o hacia su negocio, Juan, muy asustado, le paga el dinero a Francisco para evitar, según pensaba, que lo golpearan.
Antes de abandonar el lugar, Arturo le exige a Juan el pago de 3,000 pesos extras alegando que era “por las molestias que había ocasionado”, Francisco no realizó ningún comentario en ese momento, Juan aun asustado, le proporciona el dinero a Arturo, ambos (Francisco y Arturo) abandonan el local. Una vez ya alejados del local, Arturo le quiere dar los 3,000 pesos extras a Francisco, sin embargo, este no acepta comentándole que “el solo necesitaba el dinero que le había prestado a Juan, que el extra podía quedárselo él”, a lo que Arturo acepta de inmediato, ambos se despiden y cada quien toma su camino. Al siguiente día, Juan acude a la Fiscalía General del Estado para interponer una denuncia por extorsión en contra de Francisco y Arturo por todo lo que había pasado. La fiscalía emite una orden de arresto en contra de ambos, Francisco es capturado y Arturo escapa del país a “esconderse” un tiempo con un primo en los Estados Unidos.
